Paseando por Luang Prabang
Hoy tuve un día único. De esos que jamás olvidaré. Y lo curioso es que pasé casi todo el día sola y sin hablar. Lo crean o no, así fue. Y aunque mi cabeza no para de pensar ni aunque esté haciendo meditación la experiencia del silencio es muy gratificante. Pero antes de hablar de …